

La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) resaltó en su Informe Mundial 2021, que el Parlamento ecuatoriano, integrado por 137 asambleístas, esté dirigido por primera vez en su historia por una mujer indígena como Guadalupe Llori Abarca.
Desde el 14 de mayo de 2021, que fue designada como presidenta del primer poder del Estado, Llori ha desarrollado sus funciones de manera transparente, legislando y fiscalizando con firmeza siempre defendiendo los derechos de los ecuatorianos.
En 2008, HRW apoyó y reconoció la defensa de los Derechos Humanos de la entonces Prefecta que fue encarcelada 11 meses, por su lucha en contra de las empresas petroleras en la parroquia de Dayuma, provincia de Orellana, de donde es oriunda.
En esa fecha Human Rights Foundation destacó que “celebra el triunfo de los derechos humanos en la persona de Guadalupe Llori, pues este es un triunfo para todos los ecuatorianos y ecuatorianas”; en aquella época esta organización, denunció públicamente tratos “denigrantes” por parte de las autoridades.
Guadalupe Llori es un símbolo de lucha y sacrificio; el trabajo de la presidenta del Legislativo sobresale desde muy joven en defensa de los Derechos Humanos, con énfasis en la protección de la Pachamama, Salud, Educación y Bienestar Social.
Es abogada de profesión, graduada en la Universidad Santiago de Guayaquil (2014), sobresaliendo en el campo universitario al ser dirigente estudiantil y reconocida activista a favor de los Derechos Humanos. Fue electa Alcaldesa de Orellana desde 2000 al 2004, y Prefecta de esa misma provincia desde 2004 hasta el 2018.