

El jueves 19 de mayo se dio a conocer que el abogado y activista político, Pedro Granja, asume el patrocinio y defensa jurídica del concejal de Machala, ab. Álex Díaz Guamán, sentenciado a 15 días de prisión y al pago de 50 mil dólares, por una supuesta contravención que alega la parte acusadora.
Pedro Granja en rueda de prensa, dijo que el Gad Municipal de Machala prefirió contratar abogados para que hagan ordenanzas municipales y no comprar tanques de oxígeno que los pacientes de covid-19 requerían. Con 34.000 dólares si se podía hacer, pero el alcalde Darío Macas no tomó la decisión, enfatizó.
Granja informó que el monto del contrato asignado por contratación directa fue de 34.000,00 dólares para que se elaboren 300 ordenanzas.
Consta que el contratista se quedó con 17 mil dólares (50% del monto del contrato), sin que hasta la fecha se haya aprobado ordenanza alguna de dicho contrato.
El jurista dio a conocer que está pidiendo al juez una aclaración y ampliación de la sentencia, misma que tiene varias contradicciones cuyas pruebas no son determinantes. Es una sentencia que criminaliza la fiscalización de los recursos públicos, y por esta razón estamos informando a varias organizaciones internacionales de Derechos Humanos el caso del concejal Álex Díaz Guamán.
“Alcalde Macas, si usted cree que el concejal Álex Díaz le va pedir disculpas, siga sentado esperando, porque vamos iniciar la madre de las batallas judiciales y llegaremos a instancias internacionales para demostrar que la sentencia de instancia no tiene ninguna fundamentación convincente”, manifestó Pedro Granja.
Que toda Machala lo sepa, ciertamente, Álex Díaz es culpable de fiscalizar el manejo de los recursos públicos, de clamar por tanques de oxígeno para la gente que se estaba muriendo con covid-19 y, que el alcalde Macas no priorizó. Esta forma de hacer política, atenta contra los principios de la democracia sustancial. Muchos sectores quieren opinar en la silla vacía del Gad Municipal, pero nadie quiere participar en ese espacio democrático porque acaban de condenar a un concejal. El objetivo es sembrar miedos para cosechar silencios, pero de este grupo humano no lo van a lograr, concluyó Pedro Granja.