Desde el pasado 7 de agosto de 2025, el camarón ecuatoriano —principal producto de exportación del país hacia Estados Unidos— enfrenta un nuevo arancel del 15%, medida que reemplaza el acceso con arancel cero vigente hasta entonces. La decisión responde a la aplicación de aranceles recíprocos dispuestos por el presidente estadounidense Donald Trump.
En 2024, Ecuador se consolidó como el segundo mayor proveedor de camarón a Estados Unidos, con envíos de 412 millones de libras, valoradas en $ 1 .280 millones. Solo en el primer semestre de 2025, las exportaciones alcanzaron 296 millones de libras, por un valor de $ 867 millones. Según la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA), este volumen ya ha implicado el pago de $ 45 millones en aranceles.
“Con el incremento anunciado por la Administración Trump, en este segundo semestre se pagarán $ 20 millones mensuales en aranceles recíprocos, es decir, USD 120 millones adicionales hasta diciembre. De mantenerse la medida, el costo total para 2025 llegaría a $ 170 millones”, alertó José Antonio Camposano, presidente ejecutivo de la CNA.
A la nueva tarifa se suma un recargo del 3,78% por derechos compensatorios, resultado de una investigación estadounidense por supuestos subsidios a la industria. En conjunto, el camarón ecuatoriano enfrenta hoy una carga arancelaria total de 18,78% para ingresar al mercado norteamericano.
El sector advierte que esta presión fiscal amenaza la competitividad internacional del producto y pone en riesgo más de 300 mil empleos directos e indirectos. Por ello, la CNA exhorta a acelerar negociaciones para alcanzar un acuerdo comercial que restablezca condiciones de acceso equitativas. “Cada día sin un acuerdo representa millones en pérdidas y una amenaza tangible para una actividad estratégica para la economía del país”, enfatizó Camposano.