La parroquia Abañín, ubicada en el cantón Zaruma, enfrenta una creciente ola de delincuencia que incluye robos, asaltos, abigeato y tiroteos. Esta situación se ha agravado tras el retiro de la Policía del UPC (Unidad de Policía Comunitaria), sin ninguna explicación, dejando a 12 comunidades desprotegidas.
Las comunidades afectadas son: Lacay, Algodonal, Tunuyunga, Aguacate, Tapral, Naranja Loma, La Unión, Daligzhe, Ganacay, Achiraloma, Oro Playa, Zhiquin y la cabecera parroquial. Anteriormente, un patrullero estaba asignado a la zona, y los moradores colaboraban en su mantenimiento mediante la compra de neumáticos y baterías.
Sin embargo, los dirigentes consideran que la falta de vigilancia genera mucha preocupación entre los habitantes que ahora se sienten vulnerables y desprotegidos. La situación exige una respuesta urgente por parte del Gobernador de El Oro y del alcalde del cantón Zaruma para restaurar la seguridad en esta área rural.





















