“¡Llegaron los UPS!, llévelos antes de que se acaben”, voceaba el vendedor de un local ubicado en la calle Chimborazo.

En diferentes locales se ofertan UPS de 500 VA (voltios-amperios), de 1.000 VA y hasta 2.000. Cada uno con autonomía que va desde dos hasta seis horas, afirman vendedores.

“Como la gente se dio cuenta de que los cortes van a seguir de largo ya están buscando más los equipos grandes, los que se puedan conectar más cosas. Aquí ya viene gente que tiene sus power banks, pero quieren algo más estable”, contó Luis Chancán, quien labora en un local de artículos de tecnología en la calle Colón.

Para Chancán, la necesidad también ha dañado el mercado. El colaborador afirma que, en las últimas semanas, han nacido negocios que traen aparatos falsificados que se venden como originales y a precios elevados.

“Les dicen a la gente que es un UPS mejor que el que ofrecen en otros locales, con más capacidad, y finalmente son equipos ‘chimbos’ que no tienen garantía. Aquí ya ha venido mucha gente a buscar nuevos equipos luego de haber gastado más de $ 100 en esos que son falsificados”, contó.

Usuarios que llegan a locales del centro señalan que la necesidad hace que una persona adquiera los productos así sea a precios elevados. Marianela Pizarro había recorrido todo el fin de semana diferentes zonas de la Bahía y del norte de Guayaquil para encontrar el mejor precio de dos UPS que requiere para su casa y oficina.

En locales del norte, indicó, cotizó equipos en más de $ 150. En la Bahía, aunque esperó hallar artefactos a menor precio, encontró solo rebajas entre $ 10 y $ 20.

“No es que en el centro está barato, todo está caro porque entiendo ellos tampoco tienen mucho en bodega. A uno le dicen: compre ahora porque no se sabe si mañana vaya a encontrar. Pues eso me pasó hoy (lunes) que fui al norte, al mismo sitio que había cotizado el UPS el sábado y ya no lo encontré”, manifestó.

Fernando Montiel, quien tiene planificado adquirir uno de estos bancos de energía en estos días, dijo que las autoridades deberían hacer un control de precios de estos artículos que ahora son demandados.

“Como lo hicieron en tiempo de pandemia para las mascarillas o para los medicamentos. Los cortes nos tienen en una emergencia, pero no por eso la gente debe aprovechar y subir los precios como si no hubiera mañana”, puntualizó.

Con información de: El Universo.